Henri Pittier fue un gran naturalista y botánico suizo del siglo XX, pionero en la creación de los Parques Nacionales de Venezuela. Su afición por el conocimiento científico le lleva a viajar por el Mediterráneo, Cercano Oriente y buena parte del continente americano; haciendo de Costa Rica y Venezuela sus parajes predilectos, y son los países donde contribuyó en notables ejemplos en pro del cuidado de los ecosistemas naturales, como el Parque Nacional Henri Pittier ubicado al norte de Maracay (estado Aragua) y su “Manual de plantas usuales de Venezuela” que ha sido reeditado en varias oportunidades.
Henri François Pittier nació el 13 de agosto de 1857 en Bex (Suiza). Se graduó como Ingeniero y Doctor en Filosofía en la Universidad de Jena (Alemania); además estudió en la Escuela Politécnica Federal de Zúrich y fue profesor de ciencias naturales y geografía en la Universidad de Lausana (Suiza), institución que le concedió el Doctorado Honoris Causa en Ciencias. Su carrera como investigador y divulgador de la buena práctica botánica fue extensa y dejó frutos en Costa Rica, Estados Unidos y Venezuela.
En 1919 se radica definitivamente en nuestro país, donde trabajó para el Ministerio de Relaciones Exteriores, Ministerio de Agricultura y Cría, en el Herbario Nacional (actual Instituto Botánico de Venezuela), en el que contribuyó a levantar la información de más de 10.000 especies de flora y fauna nacional. Fundó varias instituciones y revistas, y en su labor como educador tuvo como discípulos a Tobías Lasser y Francisco Tamayo, y se le reconoce su labor como Director del Observatorio Cajigal, que logró modernizar en tan solo dos años de gestión.
Su amor por la naturaleza se consolidó en 1937 con la creación del primer gran reservorio o Parque Nacional Rancho Grande y que posteriormente se le bautizará como Parque Nacional Henri Pittier (1953), en homenaje a este gentil investigador, educador y autor de casi trescientos artículos científicos, que asumió Venezuela como su gran laboratorio conservacionista hasta el día de su muerte acaecida en Caracas el 20 de enero de 1950, a sus 93 años.
Prensa CAVIM