10 DE AGOSTO 1954 SE FUNDA LA SOCIEDAD VENEZOLANA DE CARDIOLOGÍA

La Sociedad Venezolana de Cardiología conmemora el 10 de agosto su sesenta y siete aniversarios. Su inicio fue producto de la voluntad de 35 cardiólogos que decidieron según consta en el acta constitutiva, fundar una “Sociedad que tiene por objeto agremiar a los médicos cardiólogos del país, para impulsar el estudio de las afecciones cardiovasculares; desarrollar el sentido de solidaridad entre sus asociados y fomentar la acción pública y la privada en favor de la lucha contra las enfermedades del aparato circulatorio”.

En el contexto histórico del momento de nacimiento de la Sociedad Venezolana de Cardiología, es importante señalar que la cardiología como especialidad se considera que en el mundo comenzó alrededor del año 1920, con los aportes de los inventos del esfigmomanómetro, la radiología y la electrocardiografía que complementaron los avances de la clínica y la patología cardiovascular de los siglos anteriores. En Venezuela el Dr. Heberto Cuenca, considerado como el primer cardiólogo venezolano, trajo el primer electrocardiógrafo en 1925 y en las tres décadas siguientes regresaron al país, los cardiólogos que se habían especializado fundamentalmente en Francia y que decidieron fundar la Sociedad. Es importante señalar que en las décadas de los años cuarenta y cincuenta, cristalizaron una serie de iniciativas en la cardiología venezolana, que califica este lapso como su etapa de oro. En 1948 inició sus actividades la primera organización no gubernamental cardiológica en Venezuela, denominada Fundación Centro Nacional de Cardiología, la cual fue factor fundamental para la modernización de la cardiología en el Hospital Vargas de Caracas, al darle soporte financiero para el inicio de la hemodinamia y la cirugía cardiovascular en los años 1951 y 1952. Esta alianza sinérgica entre la comunidad mediante una organización no gubernamental y una institución de administración gubernamental como el Hospital Vargas, constituyó una aproximación innovadora para la época, que aún tiene plena vigencia en el presente. Otros hechos que son importantes destacar en esta etapa fueron la fundación de la Cátedra y el Servicio de Cardiología en el Hospital Universitario de Caracas y la realización de las primeras Jornadas Nacionales de Cardiología en la sede de la Universidad Central de Venezuela en el año 1957, el inicio de la Revista oficial de la Sociedad Venezolana de Cardiología en 1958 y la fundación de la División de Enfermedades Cardiovasculares del antiguo MSAS en 1959, como órgano rector de la Política de Salud Cardiovascular en el país, que tuvo como un antecedente importante el Servicio Sanitario de Control de Enfermedades Cardiovasculares organizado en 1955, lo cual contribuyó a desarrollar la red de servicios cardiovasculares en los diferentes niveles de atención en todo el país.

Desde su fundación la Sociedad Venezolana de Cardiología ha realizado 50 Jornadas y Congresos Nacionales de la especialidad, los cuales son un escenario de intercambio científico y de encuentro de la cardiología venezolana. De esta breve recopilación de hechos históricos tenemos algunas lecciones para el presente y futuro, como son la cooperación entre entes gubernamentales y no gubernamentales para el desarrollo de Políticas de Estado, la articulación entre la Academia que forma el recurso humano y los organismos que incorporan a éstos al campo laboral y la organización de redes de atención por niveles de complejidad, que con lineamientos doctrinarios del pasado, permiten realizar innovaciones tecnológicas como por ejemplo la educación a distancia y la telemedicina.

Prensa CAVIM